viernes, 8 de marzo de 2013

¡Feliz 8 de marzo!

Hoy en el cole le he contado a mis niñ@s qué día era.

Al principio me han preguntado que cuándo era el día del hombre. Entonces les he puesto un cuento que se llama "Arturo y Clementina". Un cuento sencillo que había encontrado en internet y que guardaba para este día. Los protagonistas son dos tortugas.

Clementina tenía muchas inquietudes cuando conoció a Arturo, quería trabajar, pintar, escribir su propia música, viajar... pero Arturo la fue convenciendo poco a poco de que su lugar era estar en casa esperando a que él llegar. Ella, claro, se aburría mucho y él le hacia ver que se aburría porque era tonta. Y ella se fue convenciendo de que lo era y que el inteligente era Arturo, que todo lo sabía.

También le quitó de la cabeza que pintara o creara música, según él, porque no tenía capacidad para hacerlo. A cambio de todo ello le hacía regalos.

Para sustituir su deseo de escribir música, le regaló un enorme tocadiscos que ató a su caparazón y después un cuadro y un jarrón, y una colección de pipas y... hasta que el peso que soportaba casi no le dejaba moverse.

Tal era su agobio que, un día de mucho calor, dejó el caparazón en casa y se fue al río a bañarse antes de que regresara Arturo, que al llegar a casa la encontró feliz y con una gran sonrisa que no supo explicar y entonces le dijo que estaba loca, que solo los locos sonríen así.

Pero Clementina salía todos los días del caparazón sin que él lo supiera, hasta que un día no volvió más. Entonces Arturo reunió a sus amigos y les contó lo ingrata que había sido Clementina. La colmaba de regalos, tenía de todo y lo había abandonado.

Mis alumn@s han entendido que el "tortugo" no la dejaba hacer la cosas que le gustaban y con las que se sentía a gusto, era tan desgraciada que tuvo que irse y ser libre para poder ser feliz.

Así, muchas mujeres que aparentemente lo tienen todo, se sienten asfixiadas, menospreciadas, infravaloradas. Muchas consiguen liberarse de yugo opresor, otras no tienen tanta suerte.

La lucha ha sido dura, es dura. Y nos queda un largo camino aun por recorrer. Mientras que a las mujeres se les valore su trabajo muy por debajo que al de los hombres, mientras que tengan que llevar el peso de la casa y de la familia, mientras que se vean sobrepasadas por sus compañeros a la hora de ascender en el trabajo, solo por el hecho de ser mujeres, mientras que tengan que demostrar doblemente su valía, mientras que el gobierno ni siquiera hable de igualdad, si no es en este día de las mujeres y solo para los actos festivos, mientras que las mujeres que salen en los telediarios digan que se avergüezan de las "cuotas"... MIENTRAS, tendremos una larga lucha para llegar a la IGUALDAD.



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