Y MAÑANA LA CARRERITA

¡Qué Semana Santa estamos teniendo, señor!

Hoy, un día espectacular, con una temperatura digna de un buen baño en la piscina ¡20º!

Ayer, amenaza de lluvia, así que la Virgen de los Dolores apenas sacó el manto una mijita, lo justo para hacer una moneria y entrarse pa dentro que se las piraba. Claro que mejor eso que la carrera que nos dimos el jueves detrás del Nazareno. Bueno, detrás, detrás, lo que se dice detrás, no fuimos. Estábamos tomando una cervecita en una terraza y pasó el paso como exhalación ¡parecía Fernando Alonso en la salida de cualquier gran premio!.

¿Y mañana? Mañana da lluvia, ¿qué va a pasar con La Carrerita? ¡ya veremos! porque como es eso, "una carrerita", salir puede salir "corriendo", es un momento. Y después del encuentro, otra carrerita y a la iglesia. No hay mucho que dudar; el problema van a ser los paraguas. Que como una es bajita no voy a ver nada. Casi mejor me quedo en casa, que mañana lo dan en directo por la tele del pueblo y por internet. 

Y que además hoy hay cambio de hora, verás tu el lio. ¡Anda que no hay día para cambiar la hora! pues no, tiene que ser la madrugada del día de La Carrerita. Vas a ver la cantidad de gente que se queda en la cama y llega una hora tarde a ver tan magno acontecimiento. Que por cierto, hay una novedad y es que en los balcones municipales se ha entrado por sorteo.

De todos modos, llueva o no llueva, con cambio horario o sin él, mañana para los villanovenses será un día largo. Unos se acostarán tarde, que es lo que se ha hecho toda la vida, ir a ver La Carrerita de "empalme", o sea, sin acostarse (en la cama) y otros madrugarán para poder instalar en un buen sitio la escalera, para poder ver desde una buena atalaya los rizos al viento de la Virgen de la Aurora, el bamboleo de túnica y los vítores desde todas las gargantas de los asistentes.